Después de que el monoplaza de Mark Webber le dejará plantado en la última vuelta del G. P. de Singapur, Fernando Alonso recogió al australiano en su Ferrari y los dos llegaron a la meta subidos en el mismo coche. Dicha imagen no gustó a la FIA que no dudó en hacerles llegar a ambos pilotos una reprimenda. Como ya era la tercera advertencia que recibía el de Red Bull, será sancionado en la próxima carrera en Corea con una penalización de 10 posiciones. El español se queda sin dicha sanción al ser su segunda reprimenda del año, así que, tendrá que tener cuidado con los mandamases de la FIA...